-Pero...¿¡Como es posible!?...¿Estoy...vivo?...(Sorprendido).
Al parecer había resucitado,me desperté en un lugar que no olía muy bien y tenía mal aspecto,en una terraza estaba un hombre contemplando el oscuro cielo de la noche,me dirigía hacia el cuando se dió la vuelta,no me lo podía creer,¡ERA EL REY EXÁNIME!.
Intenté moverme hacia atras pero mi cuerpo no respondía,el rey exánime dijo que no intentara moverme porque el controlaba mi cuerpo,entonces empezó a darme un discurso sobre que mi vida y mi voluntad le pertenecían,entonces descubrí que si hacía un gran esfuerzo podría recuperar mi cuerpo.Seguí sus instruccioes al pié de la letra para que no sospechara,hice todo lo que me ordenó sin rechistar,despues me dijo que me dejaba en manos de sus instructores,el primero con el que me entrené era un hombre aparentemente humano y muy alto,se hacía llamar el instructor Razuvius,tenia muchas sicatrices en la cara,me dijo que buscara una espada cualquiera y que la llebara a una forja de runas.
Unas horas despues me envió a un campamento en un grifo esquelético ,una vez allí me llebaron ante lo que parecía un elfo vampiro,el me hizo hacer cosas espantosas de lasl que no me siento orgulloso,pero de las que aprendí bastante sobre las batallas,pero maté a muchos inocentes,pero no tenía otra opción porque cada vez que me negaba a algo oía la voz de rey exánime en mi cabeza diciendo me iría a por jandol y mis amigos.
Se podría decir que lo único bueno que conseguí fue un gran caballo,experiencia y unas armas estupendas aunque..¿para que quería todo eso si el plan del rey exánime era masacrar a la cruzada escarlata?...